¿Cuáles son los componentes principales de un DGS y cómo se aplican las vibraciones al lecho de balasto?
Un grupo de estabilización está formado por dos componentes básicos e independientes entre sí: los excitadores de masas excéntricas y los cilindros de carga vertical. Dependiendo de la máquina, se instala un solo grupo o dos grupos acoplados.
En cada grupo, unas masas excéntricas contrarrotatorias generan una vibración dirigida transversalmente a la vía. Las masas excéntricas están sincronizadas mediante un engranaje y dispuestas de manera que las componentes de la fuerza vertical se anulen entre sí, produciéndose una vibración puramente horizontal.
Además, cada grupo cuenta con dos cilindros hidráulicos de carga vertical, que se encuentran apoyados en el bastidor de la máquina y aplican una carga vertical ajustable de forma continua.
Unos rodillos guía y de presión transmiten las vibraciones al emparrillado de vía y facilitan así un trabajo con avance continuo. En los aparatos de vía, los rodillos de presión laterales se elevan brevemente en uno de los lados a efectos de no dañar ningún componente del desvío. Entretanto, los rodillos guía y de presión en el lado de la vía directa asumen la transmisión de las vibraciones al emparrillado de vía.
En 1983, la Universidad Técnica de Graz realizó exhaustivos ensayos a fin de determinar los parámetros óptimos para la estabilización dinámica de la vía. En este contexto se comprobó, que las vibraciones horizontales compactan el balasto con una eficacia hasta siete veces mayor que las verticales.
(J. Fischer: Influencia de la frecuencia y la amplitud sobre la estabilización del balasto de la superestructura. Tesis doctoral, Universidad Técnica de Graz, junio de 1983.)
