Para proporcionar una alta seguridad al personal en condiciones climáticas adversas (p. ej. viento o humedad), los suelos exteriores están provistos de chapas estriadas para evitar resbalones. Una barandilla de seguridad desmontable o plegable y manijas en las escalerillas reducen el riesgo de caídas durante los diferentes trabajos.
Al trabajar con la plataforma elevadora de trabajo o con la grúa de carga, uno de los dos bogies puede bloquearse hidráulicamente (bloqueo de la amortiguación), para asegurar la estabilidad necesaria.
El sistema de control calcula la distribución de cargas de los diferentes grupos teniendo en cuenta el entorno (p.ej. geometría de la vía, viento). Opcionalmente, para los alcances máximos pueden emplearse patas de apoyo adicionales.
Durante las labores de carga con la grúa puede mantenerse una distancia de seguridad suficiente mediante un telemando. Un dispositivo de seguridad evita un doble accionamiento, haciendo imposible que dos operarios manejen a la vez la plataforma elevadora o la grúa. La marcha ultralenta también puede pilotarse con el telemando. En caso de soltar la palanca de control del telemando (ya sea voluntaria o involuntariamente), la máquina frena automáticamente y se detiene.
El telemando cuenta con dos pulsadores de hombre muerto. Uno de ellos debe estar pulsado para realizar cualquier función de trabajo. En vez del pulsador de hombre muerto, también puede equiparse con un interruptor de inclinación. Así se previenen movimientos involuntarios, p. ej. en caso de que el operador pierda la conciencia. Otra alternativa consiste en un bloqueo del teclado. Éste desbloquea el mando en cuanto se pulsa el pulsador de hombre muerto. Pero si tras un lapso de tiempo definido no se registra ninguna reacción, las funciones del mando se bloquean.
Los daños en la máquina o las lesiones del personal pueden evitarse mediante medidas de prevención. Al inicio del trabajo el usuario define la limitación de altura y de alcance. La limitación de altura puede activarse para prevenir que el usuario reciba una descarga de la catenaria bajo tensión. La limitación de alcance puede seleccionarse para cada lado y evita invadir la zona de seguridad hacia la vía adyacente.
La máquina cuenta con numerosos pulsadores de parada de emergencia, en los telemandos, en la plataforma de trabajo, etc., para parar la máquina en caso de imprevistos.
Para garantizar la funcionalidad y la seguridad incluso en situaciones imprevisibles, la central electrónica supervisa determinados valores límite que, en caso de superarse, activan procedimientos automáticos de seguridad. Al disminuir la presión hidráulica por debajo de un porcentaje predeterminado, como p.ej. en el caso de una rotura de cable, se activan automáticamente todos los frenos de la polea de fricción y del vehículo. Al superarse la fuerza de tracción ajustada, primero se emite una señal acústica de alarma, lo que permite la reacción manual del operario. Si la tensión continúa aumentando, también se activarán todos los frenos y, con ello, una parada de la máquina.
