En vez de la información sobre la capacidad de reflexión de los objetos, las imágenes térmicas ofrecen información sobre las temperaturas que son irradiadas desde la superficie de los objetos en el rango de las longitudes de onda de los infrarrojos. Las termografías ofrecen información fiable cuando, p.ej., se buscan zonas quemadas en terceros carriles o filtraciones de agua en túneles. Las temperaturas normalmente se reflejan en imágenes en escala de grises, donde las zonas más claras representan zonas más cálidas y las zonas oscuras representan temperaturas inferiores a la temperatura media de la termografía.
El sistema se compone de una cámara térmica digital, que se maneja desde un Notebook y que graba imágenes térmicas en ambos sentidos de marcha. La cámara del sistema de termografía se encuentra en una caja impermeable y se sitúa siempre sobre el eje de la vía, gracias a un mecanismo de maniobra. Las imágenes se graban a intervalos seleccionables, es decir, cada 2 m.
Mediante un software, las temperaturas de las termografías pueden observarse en tiempo real o también en modo reproducción.
