Esta norma, publicada en el año 2009, define “los requisitos para la homologación de un proceso de soldeo por medio de una máquina de soldeo de carriles a tope por chispa móvil en ubicaciones que no sean instalaciones fijas”. Aparte de exigir una mayor precisión geométrica y una mayor resistencia a rotura y durabilidad a largo plazo, también regula las condiciones durante el proceso de soldadura.

  • Los dispositivos de apriete que fijan los carriles no deben producir daños que posteriormente pudieran producir fisuras en los carriles.
  • Durante el proceso de soldeo no puede interrumpirse la combustión del metal una vez comenzada. El recalque tiene que realizarse inmediatamente después con fuerza suficiente.
  • El desbarbado debe estar automatizado, debiendo permanecer la soldadura bajo presión durante este proceso.
  • Todas las soldaduras tienen que realizarse siguiendo secuencias de trabajo programadas y automáticas. Los parámetros de la soldadura son definidos por medio de ensayos y no deben modificarse una vez aprobados.

La homologación de la cabeza de soldadura en la práctica

Para la homologación principal se realizan 12 soldaduras con el perfil de carril 60E1 o 60E2 y acero grado R260. Después, estas probetas se envían a laboratorios de ensayos acreditados para su evaluación.

Para garantizar la reproducibilidad de las soldaduras, los parámetros de soldadura se ajustan una única vez y no deben ser modificados.

El procedimiento de homologación incluye las inspecciones siguientes:

  • inspección visual,
  • desbarbado e inspección del recalque,
  • decalaje de la soldadura,
  • inspección por partículas magnéticas o líquidos penetrantes,
  • ensayo de flexión,
  • examen macrográfico,
  • examen micrográfico,
  • ensayo de dureza P –30HV30, +60HV30 (P: dureza media del carril sin soldar),
  • ensayo de fatiga.

Cada cabeza de soldadura debe ser homologada por separado.


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